¡Loves! Ya estamos de vacaciones. ¡Por fin! No sabéis las ganas que tenía de que llegara esta semana de vacaciones porque, ¿a que no sabéis dónde me voy? ¡A la playa! Sí, ya sé que no hace tiempo de playa, o al menos no todos los días, pero es que no puedo remediarlo, ¡me encanta!
Me voy al sur, me ha invitado un amigo a su casa en la playa y no he podido resistirme. Estaremos una semana los dos solos pero no me importa porque está la playa y pienso pasarme allí casi todas las horas que pueda, aunque sea tumbada en la arena. Disfruto mucho con ella.
Creo que la culpa es una de las mejores experiencias sexuales que he tenido, ¿no os la he contado todavía? Veréis, fue a los 20 años, cuando estaba con un chico que había conocido hacía un par de semanas. Los dos veraneábamos en el mismo lugar y bueno, empezamos a hablar en la playa y poco a poco fuimos buscándonos, quedando para comer, para salir por la noche, etc. Yo había ido allí sola porque no tenía ganas de que los amigos empezaran a hacer planes y demás, prefería ir a mi bola y así fue como acabé con él que había ido allí porque se iba de España y quería despedirse de su tierra natal y sobre todo el mar, que le encantaba. Sigue leyendo
Debe estar conectado para enviar un comentario.